La oración es necesaria en toda ocasión, es acercarse desde lo interior hacia Dios que todo lo ve y todo lo sabe. Pedirle en oración que os conduzca y os muestre su camino, que os enseñe a santificar toda obra para que sea amado y de esa forma pueda ser conocido entre los que aun no le conocen o le ignoran.
El que a Dios ama se encuentra fortalecido, renovado y encuentra consuelo en toda circunstancia. Buscar su instrucción, escuchar su palabra, seguir sus consejos y esperar con paciencia cuando las pruebas parezcan que os superan, a su debido tiempo es cuando obra. Disponer vuestro corazón. En la tierra, fui a instruir y llamar a los pecadores a la conversión, hacer un lugar para que Mi Santo Espíritu pueda habitar en vosotros. Amén.
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